— La Junta Tuitiva fue una junta de gobierno local en nombre o tuición sobre la soberanía real en ausencia del rey de España, Fernando VII. Fue formado en la ciudad de Nuestra Señora de La Paz el 16 de julio de 1809, y duró hasta el 30 de septiembre del mismo año.
— En este día se desconoció la autoridad española, al obispo, y dieron paso a la declaración de la independencia local.
–La Junta Tuitiva estuvo constituido por Presidente de la Junta (coronel comandante Pedro Domingo Murillo) y los vocales (Melchor León de la Barra, cura de Caquiaviri; José Antonio Medina, cura de Sicasica; Juan Manuel Mercado, presbítero; Antonio de Ávila; Gregorio García Lanza, auditor de guerra; Juan Basilio Catacora; Juan de la Cruz Monje y Ortega, asesor). Los secretarios (Sebastián Aparicio; Juan Manuel Cáceres, escribano). Y los vocales suplentes (Sebastián Arrieta, tesorero de la Real Hacienda; Antonio de Ávila; Francisco Diego Palacios; José María Santos Rubio; y Buenaventura Bueno). Y los Diputados indígenas (Francisco Figueredo Incacollo y Catan (Francisco Katari Inca Kollo), representante del partido de Yungas; Gregorio Rojas, representante del partido de Inquisivi; y José Zanco, representante del partido de Larecaja o Sorata).
–El 27 de julio se aprobó el «Plan de Gobierno» de diez artículos que se considera el primer estatuto constitucional de América Latina. Se enviaron diputados a cada uno de los seis partidos de la Intendencia de La Paz. Se formaron cinco ministerios, llamados departamentos: Gobierno, Guerra, Gracia y Justicia, Hacienda y Culto.
–El 11 de noviembre del mismo año, los realistas españoles recuperaron la ciudad.
— Goyeneche ordenó el juzgamiento de los revolucionarios. Diez de los cabecillas fueron ahorcados, otros fueron degollados y sus cabezas clavadas en picas colocadas en la vía pública y otros fueron puestos en prisión o desterrados a las islas Malvinas y a las Filipinas. A todos se les confiscaron los bienes.
–Los ejecutados el 29 de enero de 1810 fueron: Basilio Catacora, Buenaventura Bueno, Melchor Jiménez, Mariano Graneros, Juan Antonio Figueroa, Apolinar Jaén, Gregorio García Lanza, Juan Bautista Sagárnaga y Pedro Domingo Murillo quien, según una leyenda que fue difundida en La Paz, antes de su ejecución en la horca pronunció las siguientes palabras: “Compatriotas, yo muero, pero la tea que dejo encendida nadie la podrá apagar, ¡viva la libertad!”
Wtv/prensa, La Paz 9 de julio de 2023.– La ciudad de La Paz recuerda los 214 años de la Gesta Libertaria que buscó la soberanía del pueblo y la independencia autónoma a través del primer parlamento hispanoamericano denominado la Junta Tuitiva de los Derechos del Rey y del Pueblo, que fue formada el 16 de julio de 1809. Este acontecimiento fundacional duró poco tiempo (menos de tres meses) y todos sus líderes fueron sacrificados o desterrados.
Las autoridades españolas, comprendiendo que la revolución paceña no era simplemente un movimiento circunstancial como los habidos en otras localidades del Alto y Bajo Perú en el siglo XVIII, determinaron ahogarla en sangre.
El novelista, diplomático, historiador y columnista Ramiro Prudencio Lizón, en una nota periodística denominada La revolución libertaria de La Paz (La Razón, 13 de julio de 2016), señaló eso y manifestó que la revolución del 16 de julio “fue un fenómeno político organizado con mucha anticipación, pues debía haberse producido en 1805”.
“Cabe recordar que éste estaba señalado en un ‘plan de gobierno’ de 10 puntos, denominado Estatuto Constitucional, y que el cabildo recibió pocos días después de ese 16 de julio. El plan tenía ‘como principio la soberanía inalienable del pueblo, como objeto la independencia autónoma, como fin la reforma del Gobierno y de la sociedad’”, reforzó.
De acuerdo con ese “plan de gobierno”, se constituyó la Junta Tuitiva, que se podría considerar como el primer parlamento hispanoamericano. El presidente de la misma, don Pedro Domingo Murillo, mantuvo además la dirección del Poder Ejecutivo, el cual se apoyó en el cabildo.
Prudencio Lizón manifestó que la revolución paceña no solo tuvo un carácter político, sino también social, porque a la Junta Tuitiva se incorporaron después varios representantes indígenas, como Catari Incacollo por Yungas, Rojas por Omasuyos, y José Sanco por Sorata.
“Es importante destacar que siendo La Paz una ciudad esencialmente comercial, las primeras disposiciones del cabildo y de la Junta Tuitiva fueron destinadas al fomento de esta actividad. Se trató de cambiar el sistema económico colonial, implantando la libertad de comercio e industria. Hasta entonces, el comercio estuvo severamente regulado por la Corona española”.
Los hitos históricos
El 16 de julio de 1809 se desconoció la autoridad imperial de España y dieron paso a la declaración de la independencia.
El 19 de julio se decretó la igualdad del pueblo: “ya no hay eso de pueblo bajo o pueblo alto, todos son iguales”. Primera ley antidiscriminatoria del continente, puntualiza una nota denominada La Revolución del 16 de julio (JORNADA, julio 15, 2018).
El 20 de julio de 1809 se quemaron los papeles de las deudas al rey.
El 21 de julio se emitió el Estatuto Constitucional (primera Constitución de América), que convoca al Congreso Representativo de los Derechos del Pueblo (con) un indio noble de cada Partido. Ese fue el primer parlamento que incluyó a un indígena.
El 22 de julio se creó el Primer Ejército Libertador de América Hispana, y se nombró Comandante a Don Pedro Domingo Murillo. La tropa, alcanzó a un total de 980 soldados, entre criollos, mestizos e indígenas. Contó con 11 cañones y 2 morteretes.
El 24 de julio se constituyó la Junta Tuitiva de los Derechos del Pueblo, con Gobierno Propio de mestizos, indígenas, criollos, y españoles patriotas. Don Pedro Domingo Murillo fue elegido su Presidente, fue el primer Presidente de la América Hispana, y fue elegido por el pueblo a través de la Junta Tuitiva.
Además, la Junta Tuitiva organizó cinco departamentos a manera de ministerios: de Gobierno, de Guerra, de Gracia y Justicia, de Culto y de Hacienda.
El 27 de julio se emitió la Proclama de la Junta Tuitiva, la primera de la América Hispana, que constituye la Declaración de la Independencia y que acaba con la dependencia española.
El 30 de julio se nombró a la Virgen del Carmen “Patrona de las Armas” del Ejército Revolucionario, invistiendo a ella y al niño con el Tricornio y el Bastón de mando, emblemas de la nueva República. Ese ejército enarboló la primera bandera rojo punzó y verde esmeralda, creada en 1805, y que sirvió como distintivo de las tropas y caballería patriotas. La Bandera del Ejército fue la adoptada por los revolucionaros con los colores de la Logia Patriótica que los acogió.
El gobierno independiente de Murillo sobrevivió hasta fines de octubre, cuando las tropas españolas al mando de José Manuel de Goyeneche vinieron de Puno con un ejército de 5.000 hombres.
El 25 de octubre, Murillo, con 1.000 patriotas, tuvo valor de presentarle batalla en Chacaltaya. Fue vencido, se retiró al valle de Zongo, donde finalmente fue hecho prisionero.
El 29 de enero de 1810, Murillo intentó escapar, pero fue nuevamente capturado y llevado a la horca en la Plaza de los Españoles junto a otros patriotas.
(jcrquiroga)
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